Qué hacer para alquilar tu primera casa
La escogencia de nuestro hogar es una decisión importante en nuestra vida. Para atinar se debe contar con algunas ideas y conocimientos previos. En www.citymax-mix.com encontrarás todo para el alquiler de casas en Mixco Guatemala y por eso te proporcionamos algunos lineamientos para que sepas qué hacer para alquilar tu primera casa. Sigue leyendo y toma nota de estos consejos.
Consejos previos
Lo conveniente es acudir a los agentes inmobiliarios que te ayuden en el proceso, y te guién para encontrar la propiedad que más se adapta a tus necesidades y posibilidades económicas.
Dedica tiempo a averiguar un poco más sobre el lugar que te llama la atención. Investiga sobre la comunidad, servicios, si hay acceso a transporte público, si es seguro, además si el entorno es amigables y sobre todo si el costo no afectará tu presupuesto.
Antes de iniciar la búsqueda delimita las zonas en las que te interesa vivir tomando en cuenta los precios. Lo ideal es mudarse a un lugar cerca de tu trabajo o a los lugares que frecuentas. Si decides intentarlo en una urbanización nueva, recórrela bien para conocerla mejor, visítala varias veces.
Podrías satisfacer tu demanda con inmuebles en Mixco Guatemala donde te ofrecemos una amplia gama de opciones.
Qué hacer para alquilar tu primera casa
Para alquilar por primera vez debes analizar si tienes capacidad de pago. Es importante conocer a fondo tus finanzas. Los expertos en finanzas personales recomiendan que el alquiler no debe pasar del 30 % del ingreso del núcleo familiar.
Aparte del costo del alquiler de la casa, toma en cuenta los gastos de comunidad que tendrás que costear mensualmente y los servicios. Otro punto a considerar es si la casa está amueblada o no, si no lo está comprar muebles significará un gasto extra. Por estas razones debes tomarte tu tiempo para buscar la opción que más te guste, que satisfaga tus necesidades. Además de que sea accesible para que tus finanzas no se vean afectadas.
Inspecciona bien los inmuebles
Investiga y corrobora los datos de los inmuebles. Revisa detalles como si tiene deudas en los servicios o impuestos, entre otros. Asimismo comprueba quien es el propietario, que la documentación sea la correcta y esté en regla.
Debes visitarlos y revisar bien sus condiciones, en algunos casos pueden estar deteriorados. Inspecciona detalles como las tuberías, constata el estado de las instalaciones eléctricas, las de agua y gas para confirmar que no haya fugas. Esto también te da la oportunidad de saber si los servicios están en pleno funcionamiento, porque activarlos tiene su costo.
Durante el proceso de visitas a las casas apunta las diferencias entre las que más te agradan. Enfócate en tus necesidades y piensa si el inmueble las satisface. Precisa con el propietario o arrendador si puedes tener mascota.
Indaga un poco si hay mucho ruido alrededor y si hay algún vecino problemático, o si hay algún factor de la comunidad que pueda afectarte. Busca sitios que tengan ventilación natural, te ahorrarás las molestias de los malos olores. Si hay alguna humedad has que la arreglen antes de mudarte.
Tu documentación al día
Ten a la mano los documentos que puede solicitarte el arrendador o la inmobiliaria. Información de residencia actual, dirección del trabajo o universidad en caso de ser estudiante, referencias familiares y bancarias.
Además, contacta a alguien que pudiera servirte de fiador o aval por si lo solicitan. Esta persona será responsable en caso que no puedas pagar el alquiler, por lo que debe ser alguien de confianza y dispuesto a colocar su nombre como fiador.
Al cerrar el trato tendrás que dar una copia de tu identificación. Comprobante de ingresos, que podría ser un recibo de nómina o un estado de cuenta bancario.
Informáte sobre los servicios y gastos
Antes de firmar el contrato debes tener claro quién sufragará los gastos de futuras reparaciones. Lo lógico en estos casos es que el propietario e inquilino acuerden que el primero se hará cargo de las averías estructurales. Mientras que las del día a día las pague el arrendatario.
También debes saber quién pagará la cuota de mantenimiento. Solicita información sobre el monto de mantenimiento que debas pagar en la comunidad y lo que este incluye. Esta cuota puede englobar los gastos de electricidad, agua, gas, vigilancia, etc… todo dependerá de la comunidad. Conocer estos detalles es imprescindible, debido a que puede influir en tu presupuesto.
Negocia el precio
Para negociar el precio, procura tener una idea de las tarifas de la zona. Si cuentas con suficiente presupuesto contrata un seguro de inquilinos para proteger tus cosas. Expertos aconsejan que los trámites los hagas personalmente para evitar fraudes.
La ubicación incidirá en tus condiciones de vida y por tanto de eso dependerá el precio. Así que conoce la zona, considera si cerca hay comercios, zonas verdes, espacios deportivos, escuelas, entre otros.
Contrato claro
Luego de decidir cual casa se ajusta a tus necesidades, antes de firmar el contrato de arrendamiento precisa cuales son los plazos legales. En dicho contrato se deben detallar los requisitos generales y específicos del alquiler. Así como el tiempo de duración del acuerdo que generalmente es por un año. Cabe destacar que si abandonas la casa antes del plazo tendrás que pagar una penalización.
Debes puntualizar los pagos, fechas, condiciones de la vivienda y cuál será la base de cálculo para el aumento anual de la tarifa. Es recomendable que busques asesoría para analizar cada cláusula. Igualmente presta atención al título de propiedad y al estatus de la hipoteca. Si la está amoblada es necesario adjuntar al contrato un inventario que detalle el equipamiento.
Es habitual el pago de un depósito para garantizar que se cumpla el compromiso asumido. Esta cantidad sirve como fondo si la propiedad rentada sufre algún daño. Este debe ser reembolsable y ser equivalente a un mes de renta. Será devuelto si el inquilino no debe mensualidades o ningún otro concepto al final del contrato.
Al ser tu primera vez en estos menesteres, se recomienda optar por asesores inmobiliarios. Eso te evitarás el riesgo de fraude. Deja que los representantes de la empresa contratada lidien y medien con el arrendatario.
Entrega en buenas condiciones
A la hora de entregar la vivienda procura que esté en buenas condiciones, tal como te la entregaron. De esta manera podrás recuperar el depósito y evitarás un gasto en reparaciones de última hora.
Aunque las partes deben tomar en consideración el deterioro que suele producirse con el paso del tiempo. El dueño de la casa añora encontrarse con buenos inquilinos, que cuiden su propiedad y cumplan con las normas del buen vivir, esto te garantizará buenas referencias.
Guarda todos los recibos de todos los gastos que hayas hecho, sobre todo de los servicios. Este respaldo deberás presentarlo al momento de entregar la casa.
Ahorra cuatro meses de renta para poder salir al paso con los imprevistos. Aparte del gasto del alquiler, contempla también el de mudanza que será uno de los mayores gastos. Si planeas seguir en el lugar más de un año, acuerda que el incremento sea el de la inflación.
Conoce los derechos y deberes del inquilino
El principal deber del arrendatario es pagar la renta, cumplir con lo estipulado en el contrato y responder por los daños que pudieran producirse. Ten claro que el depósito en garantía es solo para reparar daños, no para cubrir las mensualidades.
Por otra parte, si el propietario solicita la desocupación del inmueble con dos meses de anticipación tienes la obligación de desocuparlo. Como inquilino puedes efectuar reparaciones si afectan la seguridad de la casa, aunque debes obtener la autorización por escrito del propietario. Puedes llegar a un acuerdo para que el pago del alquiler sea reemplazado total o parcialmente por la cantidad que gastaste.
El arrendatario debe cumplir con los pagos de la renta y de los servicios. Cuando se cumpla el año, el contrato se renovará por otro más, hasta tres años. Las condiciones serán las mismas. Y, por último no puedes subarrendar si permiso.
Evita errores comunes al rentar
Ante la premura de conseguir un buen lugar para vivir se pueden cometer varios errores que después puedes lamentar. Uno de estos es no dedicar suficiente tiempo a la búsqueda. Dedícate a visitar las casas que te gustan, regresa si es necesario para asegurar que la elección esté en consonancia con tu presupuesto.
Toma en cuenta todas las opciones y elabora una lista de ventajas y desventajas para ir descartando. Otra falla es empeñarse en vivir en un sector de moda, lo que lleva a que tenga costos elevados. Si no estás en condiciones de pagar rentas altas, amplía la búsqueda. Seguramente encontrarás lugares más grandes por el mismo precio.
Destinar más del 30% de tu sueldo al pago de alquiler es contraproducente. Lo ideal que sea menor a ese porcentaje porque debes sufragar otros gastos aparte de los servicios, como la adquisición de los muebles que necesitas.
Pero el error más grave es no revisar el contrato. No importa el tiempo que te lleve leerlo, debes saber todos los detalles sobre lo que te comprometes a cumplir. Lo mejor es tener claras las reglas de juego. Los datos básicos que debe contener el documento son el nombre del arrendador y arrendatario, dirección del inmueble. Además del precio de renta, tiempo del contrato. Las condiciones para anular el acuerdo y las obligaciones del dueño.
No preguntar por las reglas de la urbanización puede ser un problema si no puedes cumplir con algunas de tus actividades. También es un error no buscar información sobre el entorno de donde está ubicado el inmueble. Verifica si hay mucho tráfico o ruido, así sabrás si te adaptas o no.
Igualmente el no contar con la documentación requerida puede provocar que pierdas la oportunidad de quedarte con la casa deseada. Por ello prepara los requisitos con tiempo para que a la hora de la firma no haya inconvenientes.
Con esta serie de tips tiene una idea de qué hacer para alquilar tu primera casa. Comienza la búsqueda de la misma, contáctanos y resolveremos las dudas que mantenga.
